domingo, 18 de agosto de 2013

REFLEXIONES ANTICAPITALISTAS



Richard Jesús Najul M

     Amigo de la “derecha”, antichavista, antisocialista; si haces una crítica frontal a la corrupción y no la aceptas en ninguna de sus formas (lo cual es admirable), entonces no eres capitalista, ni imperialista, ¿Qué eres, de qué lado estás?

     Si eres de la derecha y tratas de encontrar corrupción en la izquierda, pero no ves o niegas, o desestimas la que corre en la derecha, estás perdidamente disociad@ y seguramente no eres capitalista, pero estás capitalizad@ e imperializad@

     Quien ejerce poder y dominación no puede ser honesto, ético ni moral. El  capitalismo no puede autocriticarse, no puede sancionar la corrupción. Quien ejerce poder y lo impone, usa los medios para obtener y asegurar sus beneficios, mata, hace la guerra, miente, confabula, hace trampas, estrangula los recursos y los maneja para doblegar a quienes los necesitan, obligándolos a actuar a su favor. Si reprime, la corrupción es hipócrita porque el capitalismo es corrupto y corruptor, sus leyes están concebidas para dominar y controlar.

     ¿Por qué ocurre esto? Porque el imperialismo-capitalismo no es solidario. Quienes lo ostentan manejan a los demás seres humanos como recursos para su consolidación. Lo que hacen lo quieren para sí, los otros se las arreglen como puedan y deben estar a sus servicios, es decir capitalizados. Por eso no pueden ser solidarios ni honestos. En el fondo su desarrollo es primario  tienen miedo y por eso mismo se extrañan del conjunto de la humanidad; hablan de ésta como si fuese una entidad distinta del Ser Humano.

     Tanto es así que el mundo ha sido dominado por los imperios y el poder (quienes lo han practicado) desde siempre mediante diferentes modos de producción, haciendo rebaños de seres humanos, conduciéndonos al terreno propicio para sus intereses y beneficios. Durante el siglo pasado se intensificó al extremo, y en lo que va del XXI también, aunque los hombres y mujeres han despertado a la consciencia de que ya no es posible la convivencia humana basada en dominadores y dominados. Con todo el aparataje tecnológico, industrial, comunicacional, publicitario, diseño conveniente de leyes, con el apoyo de la fuerza destructiva para dominar, nos han conducido y manipulado como  ganado (rebaños), induciéndonos a actuar y hacer: comer, vestir, usar, ver, oír; a los precios de su conveniencia. Porque dominan, por ahora, el mercado; ponen los precios y los aumentan como un método de ejercer poder. Retiran los productos del mercado, sabotean el abastecimiento.  ¡No existe la consciencia de que el alimento no puede ser mercancías, que es el sustento para la vida!!

     En Venezuela empaquetan arroz saborizado pero restringiendo a porcentajes muy pequeños el arroz “natural”; reducen los contenidos de los productos envasados para incrementar las ganancias, aunque con esto bajen la calidad. Pero también manejan el miedo, el amedrentamiento y tratan de estimular las reacciones básicas para enfrentar unos contra otros.

      Esta es la punta de lanza de la “política” que practica la oposición venezolana, que encubierta, deshonesta y sociopáticamente urde planes de magnicidio y desestabilización. ¿Tal proceder es honesto, limpio, razonablemente político?

     El socialismo si puede autocriticarse porque ve que la corrupción es una desviación contraria a su esencia. Por eso puede decir que un “socialista” corrupto no es socialista, un corrupto es un antisocialista. Por eso puede decirse, en boca de un presidente socialista venezolano, como Nicolás Maduro, que se perseguirá la corrupción, donde quiera que se enquiste.
     El socialismo, que no es otra cosa que practica de la alianza entre los Seres Humanos, en función de su bienestar y máxima felicidad posible; de la convivencia solidaria, respetuosa, sabiendo que inter-dependemos los unos de los otros, que lo que hagamos o dejemos de hacer está influyendo en los demás; que tenemos los mismos derechos y deberes; que sentimos, deseamos, queremos y sufrimos, no puede admitir la deshonestidad y la corrupción porque estas actitudes contrarían tales principios y valores. Actitudes que han tornado a tal punto la vida en el planeta que la humanidad entera está en riesgo de sufrir la aniquilación.

     El socialismo, que también es antiimperialismo, llama a la vida, a la vida total, no a la vida de una nación o un continente. Para el socialismo el Ser Humano que es hijo del Universo debe respetar y preservar el planeta que habita. Debe respetarse y preservarse, cada persona es un componente interactuante e interdependiente del tejido humano.

     El imperialismo-capitalismo no es solidario, es sectario; no es respetuoso, es discriminador, por lo tanto deshonesto corrupto. Es primitivo, actúa desde su cerebro reptílico y emocional, por miedo y debe asegurarse la sobrevivencia, invadiendo, excluyendo, asesinando, robando. Para ello se vale de los medios desproporcionados, violentos sobre quienes no los pueden combatir –es cobarde-, por ahora.

     Compatriotas de Venezuela y el Mundo, si no son imperialistas-capitalistas ¿Qué son? ¿De qué lado deben estar? ¿O prefieren seguir imperializados-capitalizados?

     El equilibrio del Universo y la mayor suma de felicidad posible, propuestos por BOLIVAR y CHAVEZ, son nuestras mayores necesidades.

     Socialismo o muerte, no teman involucrarse en su construcción, donde quiera que les toque hacerlo; es necesario impulsar su instauración. No va a surgir sólo. Seamos honestos por la vida.

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