Domingo Sánchez
Ø Continuando con esta columna, resumimos los acontecimientos dentro del
Imperialismo Estadounidense más resaltantes de las últimas semanas.
ü Consumado el golpe preparado por el Gobierno de Estados Unidos y Alemania
más la Unión Europea en Ucrania, se han precipitado las cosas por varias
razones: a) La población de Ucrania, está compuesta por un 60% de rusos, quienes se
sienten afectados. b) Quienes acceden al poder, son por una parte un ex campeón de boxeo, sin ninguna
preparación política, pero lo más importante es que quien está detrás del golpe
es una Organización de origen fascista, encabezada por Olexander Turchynov,
quien no ha sido electo, pero que ya actúa como Presidente. De hecho ya fue a Washington
y se entrevistó con el Presidente Obama, quien le prometió, siguiendo las
pautas de este tipo de golpe, ayuda económica y financiera. Por su parte el FMI
también ofreció dólares en préstamos inmediatos. Además la OTAN, el brazo armado del
imperialismo estadounidense para esas tareas, está en pie de movilización y han
colocado sendas fuerzas aéreas en la vecina Rumania. Es decir todo el apoyo que
necesitan. Además el gobierno de Estados Unidos y el de Alemania, han enviado
ya tropas a Ucrania, porque Rusia, atendiendo la petición del gobierno de la península de Crimea, ha enviado cantidad
de tropas a esta península. Además Bielorrusia,
está en alerta.
ü El gobierno de Crimea ha preparado un referendo a realizarse el domingo
16, pero ya todo “Occidente” ha dicho que ese referéndum es nulo. Es decir, que
el gobierno de Estados Unidos, de Alemania, etc. Creen tener la potestad, según
ellos de anular una forma democrática como el referéndum en otro país. El
gobierno ruso por su parte ha aceptado el llamado de auxilio de Crimea y luego
del referéndum, aceptaría a esa península como parte de su territorio.
ü Vocera de este golpe, Angela Merkel de Alemania propuso y fue aprobado
por Estados Unidos y su corte, un grupo de medidas económicas contra
Rusia. Parece que se han olvidado que el
90% del gas doméstico de toda Europa, proviene justamente de Rusia. Por algo el
Ministro de Relaciones Exteriores Sergei Lavrov comentó ante tales medidas que
“hay cosas que no se olvidarán”.
ü Llevado el asunto urgentemente por el gobierno de Estados Unidos a la
ONU, en busca del apoyo de dicha organización, donde el acusado es Rusia, cuyo
representante advirtió que “Rusia no tiene ningún plan de guerra contra Ucrania” sino que está
estudiando cómo ayudar al pueblo ruso que vive en Ucrania que se siente
afectado por el golpe.
ü Lo nuevo en este artero golpe, es que quien aparece como vocera de
Occidente, es la Primer Ministra de Alemania y no el Presidente Obama.
ü A lo interno de Ucrania, aparece otro personaje Andrei Paruby,
auto-denominado como Secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de
Ucrania, quien ha llamado a la movilización general de los reservistas, ante lo
que considera una inminente guerra de parte de Rusia. Este personaje es el fundador del Partido
Nacional-Socialista de Ucrania. (¿No le suena a algo conocido como el “nacional
socialismo” de Hitler? Paruby fue uno de
los dirigentes más activos en la “Revolución Naranja” adelantada por el
gobierno de Estados Unidos en el año 2004 en Ucrania. O sea, que el nuevo gobierno ucraniano
auto-nombrado es de pura cepa nazi-fascista.
ü Tal parece pues que estuviéramos al borde la III Guerra Mundial. Sin
pretender llegar a conclusiones, ¿no hay un cierto parecido de la situación de
Ucrania con la de Venezuela actual?
ü Otro problema interno de Estados Unidos, como el espionaje de todos los
Comités del Congreso por parte del Consejo Nacional de Seguridad. En particular
se produjo un estallido en el Comité de Defensa. En efecto la senadora Diane
Feinstein, su presidenta reclamó la violación a la propia Constitución de
Estados Unidos, en cuanto al espionaje interno y en especial en lo referente al
problema de las torturas por parte de la CIA. Su actual director John Brennan,
desestimó por completo las declaraciones de la Senadora citada antes, minimizando
la situación como una “guerra de grama (paja)” entre el Senado y la CIA. Es decir que los crímenes perpetradas por la
CIA son un asunto menor. De hecho la CIA borró de los computadores de los
Senadores, los videos que tenían acerca de las torturas de la CIA, alegando una
orden del Ejecutivo. Ante el alegato de
la senadora Feinstein, alguien del Ejecutivo respondió que ello no era
cierto. ¿Y entonces? Los crímenes
cometidos ya no existen pues no hay pruebas!!! Este delicado asunto pica y se extiende, como
decimos en Venezuela.
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